Título: Asinaria
Autor: versión de J. Ricardo Martín Fernandez, Beatriz Martín González y Raúl Doval Salgado
Autor original: Plauto
Fecha de publicación: primera edición -> 1997
Reimpresión -> 2003
ISBN: 8478822828
Editorial: Ediciones Clásicas
No. de páginas: 63
Sinopsis
El viejo Deméneto se presta a colaborar con su hijo Argiripo, a cambio de una "recompensa en especie" para que este "disfrute de los goces" de la prostituta Filenia, por cuyos servicios la "dueña" pide la astronómica cifra de veinte minas de plata.
Argiripo se ha enamorado de Filenia. Padre e hijo tienen que evitar, sin embargo, que la madre de Argiripo, Artémona, se entere de tamaño proyecto; es una rígida matrona que desea educar a su hijo en la más estricta severidad y que administra con austera mano la casa. Un mercader de Pela llega para pagar la compra de unos escuálidos asnos que había comprado a Deméneto y se convierte en el objeto de las intrigas que dan título a la comedia.
Autor: versión de J. Ricardo Martín Fernandez, Beatriz Martín González y Raúl Doval Salgado
Autor original: Plauto
Fecha de publicación: primera edición -> 1997
Reimpresión -> 2003
ISBN: 8478822828
Editorial: Ediciones Clásicas
No. de páginas: 63
Sinopsis
El viejo Deméneto se presta a colaborar con su hijo Argiripo, a cambio de una "recompensa en especie" para que este "disfrute de los goces" de la prostituta Filenia, por cuyos servicios la "dueña" pide la astronómica cifra de veinte minas de plata.
Argiripo se ha enamorado de Filenia. Padre e hijo tienen que evitar, sin embargo, que la madre de Argiripo, Artémona, se entere de tamaño proyecto; es una rígida matrona que desea educar a su hijo en la más estricta severidad y que administra con austera mano la casa. Un mercader de Pela llega para pagar la compra de unos escuálidos asnos que había comprado a Deméneto y se convierte en el objeto de las intrigas que dan título a la comedia.
· · ·
Opinión personal
¡Ohayo, minna! Tras una buena temporada sin noticias
nuestras ¡aquí estamos de nuevo! Diciendo adiós a los exámenes finales para
sumergirnos en el mundo de los libros que tanto nos apasiona. Sentimos la
tardanza (TT^TT), pero no disponemos de tanto tiempo como querríamos para leer y vaciar
nuestras estanterías (que, creedme, aún tenemos mucho por leer).
De modo que iniciaremos la “temporada de verano” con algo
ligerito: ¡una obra de teatro! Sí, sí, va sin ironía. Como podéis haber leído
en la ficha técnica, esta obra tiene muy poquitas páginas que se devoran en
unas horas. Pero si os apetece echaros alguna que otra risa, está bien para
pasar el rato (no es la caña de España, pero bueno).
No os quiero contar mucho sobre el argumento puesto que,
como ya he dicho, es muy corta la historia y ya en la sinopsis desvela
bastantes cosas. Solo diré que, en ese sentido, tenemos una “comedia romántica
clásica” con enredos, amores y desamores, y personajes secundarios que, en los
momentos de más tensión, quitan hierro al asunto de una forma bastante
peculiar. Digamos que es una obra que recoge pequeñas ideas que encontramos también
en La Celestina, tragicomedia que muchos lectores conoceréis bien.
En cuando a la edición y duración de los acontecimientos, digamos que es una versión de la obra original de Plauto, más modernizada y dinámica. El ritmo es
rápido y no se hace pesada ninguna parte de la obra, al menos en mi punto de
vista.
Leímos Asinaria porque, como actividad perteneciente a las
clases de griego y latín, tuvimos que asistir a una representación de esta misma obra en el teatro romano de Segóbriga. Los actores eran andaluces y su indumentaria, extravagante;
todo junto resultaba un poco chocante (puesto que es una obra clásica, y no
acostumbramos a ver tal cambio en las formas), pero divertida al fin y al cabo.
En cuanto a la ambientación, fue representada en unas ruinas clásicas que
antaño se alzaba como un teatro. Aún se conserva parte del escenario y los
asientos dispuestos en semicírculo. De esta forma se creaba un ambiente mucho
más real al visualizar la obra, ya que en la Edad Antigua tantas y tantas comedias
eran representadas en lugares como ese.
(Si pincháis en la fotografía, se verá más grande :3)
(Y aquí tenemos una fotografía digitalizada que muestra como sería aproximadamente el teatro antaño)
Respecto a la elección de personaje, me quedo con los
secundarios, la pareja de sirvientes del protagonista. Sus personalidades me
parecen más atípicas e interesantes que lo redundante de “galán/dama”, y brindan a
la obra de un humor irónico estupendo.
Me he encontrado a mi misma muchas veces escogiendo personajes secundarios en lugar de a los protagonistas... Pero hay tantos, con
tantas personalidades e historias tan variopintas e interesantes que en numerosas
ocasiones uno/a se interesa más por ellos que por los mismos protagonistas. Muchos se merecerían un papel principal... O, quizá, si lo tuvieran, no se comportarían
de la misma manera. Supongo que es complicado.
¿Vosotros qué pensáis? ¿Os ha
pasado alguna vez?
Para finalizar, decir que siempre me han gustado mucho las
obras de teatro, y aproveché esta oportunidad para añadir una historia más al
repertorio. No es de lo mejor que he leído, pero entretiene.
¡Esperamos que os guste si os animáis a leerla!
Pétalos
- Ritmo: # # # # #
- Historia: # #
- Personajes: # # # #
- Amor: # #
- Final: # # #
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